LE GRAND MONT

 Arêches, 8/02/23

Después de un día disfrutando de las pistas de fondo en Les Contamines, nos movemos al valle de Arêches, un poco más al suroeste.

Disfrutamos de un viaje con vistas impresionantes y ya de noche llegamos a Arêches. Es un valle de pueblos pequeños, muy pequeños, donde casi no hay cobertura y son más numerosas las granjas de ganado que las estaciones de esquí.

Entre nuestras opciones algunas se caen por sí solas, ya que hay carreteras que directamente no se limpian y no podemos acercarnos a alguna zona que teníamos en mente. Pero planes no faltan, y uno que queríamos hacer era el Grand Mont así que a por ello.

Nos acercamos a la zona de Le Planay sin madrugar demasiado porque las temperaturas seguían siendo muy bajas. Lo primero que encontramos fue mucho ambiente de esquí de montaña, sobre todo gente entrenando. Allí se celebra la famosa Pierra Menta, una carrera importante de esquí de montaña a la que acude gente de todo el mundo. Este 2023 iba a ser la 37 edición, lo que demuestra la larguísima tradición en este deporte que tienen en la zona. Vimos desde muy jóvenes hasta muy mayores que salían hacia otras zonas a entrenar.

Nosotros nos vamos al monte y además nos toca buscar la ruta, así que en marcha.

La idea era salir por el fondo de valle para buscar rápidamente una buena subida al este hasta una gran arista cómoda y soleada... pero cuando vas por primera vez a una zona, hay cosas que salen y otras, muchas, que no, y en estas últimas se sitúa nuestro plan. No encontramos la subida así que continuamos por el fondo de valle, viendo de lejos el sol y moviéndonos rápido para llegar cuanto antes a él. 

Avanzamos hasta una zona más alta desde la que pudimos subir arriba, aunque bastante incómoda y con nieve dura. Pasamos a crampones en un punto por seguridad.

Llegar al sol fue un alivio. La temperatura no era inferior a otros días, unos 8 grados bajo cero en la sombra, pero este día había una suave brisa que creaba una sensación térmica heladora. En la zona de arriba apareció el sol y bastantes personas hacia el monte que acceden desde la estación de esquí, hasta llegar allí no habíamos visto a nadie...

Otra vista del Mont Blanc

Hasta la cima nos quedaba una zona muy chula con muchas vistas, y llegar arriba fue muy bonito. No estuvimos mucho porque el frío no invitaba. 

Habíamos mirado varias opciones de bajada, pero el viento no había dejado que transformara nada la nieve y se mantenía muy dura, así que decidimos bajar por donde habíamos subido hasta encontrar la estación de esquí y aprovechar la última bajada por ella.

La ruta: 19km y 1.600+ aproximadamente

Disfrutamos de una tarde tranquila en ese pueblico encantador.

Al día siguiente, último de actividad, nos dimos un pequeño paseo con los esquís y emprendimos viaje de vuelta, haciendo una parada para visitar Pont-en Royans, zona muy chula ya lejos de Alpes que conocimos con las zapatillas puestas :) 

Con las reservas energéticas vacías pero llenos de vida y ganas de volver a buscar nuevos recorridos, emprendemos la vuelta de un viaje que nos ha dejado huella!!